Los ancianos sienten que retrocedemos.
Nosotros, parece
olvidamos sentir:
Cada noche larga
Nos echamos a morir
Fuimos el corazón de la uva
el almíbar que sostiene esa piel.
Ahora poco somos.
Somos fermento, que desciende
acariciando la hiel.
sábado, 17 de noviembre de 2007
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