sábado, 7 de agosto de 2010

El futuro es nuestro

La mitad del mundo
tiene su salvación
en la punta de la lengua.
Sea besar el momento;
estirar los brazos en brusco amanecer
o sea pronunciar esa palabra
que nunca nos enseñaron en las aulas.
La mitad del mundo
alcanzaría su salvación.

Como el hombre en la luna
o las sonrisas del neón:
Como los automóviles
que trazan senderos en esta capital polvorienta.
La mitad del mundo
Empuja o se traga su voluntad
Decide o deciden por ella
Se conoce o conoce las franjas presidenciales
Se maravilla con su reflejo
O sucumbe ante los tics

Esta es tu decisión:
La punta de tu lengua
La punta de la lanza
El niño Jesús en su propio estelar (después de teletrece)
O tu mismo
Libre, soberano:
Con las manos satisfechas
al roce de las riendas.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Punto de giro

Si
decidí darle un vuelco al asunto
pero esta vez
yo soy el productor

Y nunca me ha gustado el cine de acción
pero me revuelco con esta ansia
como el protagonista
con un malo que claramente lo supera
en fuerza y astucia

rodamos por selvas
y desiertos
donde el imperialismo
se disfraza de justo conflicto bélico
y los niñitos, encochinados generalmente
aclaman lagrimeados
al musculoso (y gringo) superhéroe

pero a lo que iba
le decidí dar un vuelco a esto, si
la decisión se está rebalsando
igual que las lágrimas
un gemido blando lo confirma
recorrió el esófago para convertirse
en una parodia al grito de guerra

¡ Es que cuando sucede esto cuesta ser paciente!
tengo ganas de agarrar los teléfonos
y hacerlos sonar todos
"amigos tengo algo que decirles"
bla, bla.
dejar todo arreglado
la chichita con la que me estaba curando
metí una pata, dos o tres.
pero nada que no tenga arreglo...
¡Por eso me urge hacerlo luego!

Porque, claro
el malo pues
el malo se arranca siempre
nunca gana
¡pero el culiao aveces se arranca!

Chasquido

tengo un problema
siento que las emociones se me arrancan
se quedan un rato en mis costillas, abrigandose
con los apretones de la musculatura perturbada
para luego, con el sonido de una voz
generalmente cibernética
o a veces vaginística
arrancarse rodando por la pendiente

Se cae la emoción, grito
y en medio del grito
dibujo una sonrisa estúpida
esa sonrisa de letargo
de aplazamiento
la prórroga es larga
y las penas se pactan como las deudas
después de todo este es el neoliberalismo
y adentro de los cocos los espermios
gozan con el paraiso del consumo
luces de neón y
planes telefónicos

Se cayó la emoción por la pendiente
me tocaba pena el día de hoy
de la pena constructiva eso si
pero, bueno
el castillo de ideas falsas es más potente,
y es un lugar calentito en invierno
para los hipócritas viajeros
que vemos desfilar
montajes y montajes
mientras hacemos un documental de nosotros mismos
con ideas super tontas

La emoción llegó al suelo
el chasquido despertó a los pitufos
que dormían con la esperanza de que al día siguiente
diera el paso
que les había prometido
pero pa que tanto
si al final es siempre lo mismo
el letargo
amargo
enrrealidad sin sabor
como la gelatina transparente
así es.

jueves, 12 de febrero de 2009

miércoles, 5 de noviembre de 2008

La pule.

Ningún, pero ningún ser humano
se alimenta de miradas.
La mayoría come alcachofas
albóndigas, coliflor, betarraga.
En Chile rebanamos las vacas
mientras en India son sagradas.
En algunos países se comen las palomas;
mas nadie
abosolutamente nadie,
se come las miradas.

Mucho menos ahora que están tan caras
con esto del Wall Street.

La conocida plaga de polillas.

Las ideas sueltas que brotaron de mi anoche
mientras volvía a mi hogar
tenían la peculiaridad
de estar doblemente resecas
además de ser pronunciadas
en un tono que asustaría al mismo otoño.

Pero deben ser pronunciadas con precaución
con sagacidad y muecas heróicas.
y con los cabellos agitados por la noche,
pues,
no se debe olvidar
que las cunetas y postes en Santiago
son grabadoras y cámaras respectivamente
y lo que queda de constelación
no es otra cosa
que un moderno equipo de iluminación.

No hay que olvidar todo eso
y mucho menos mientras pronuncio
las frases de final de temporada
de este absurdo montaje cinematográfico
que ya me acostumbré
a llamar vida
vidita mía.

Defensa personal

Un tipo me dedicó un insulto
a mano armada.
pero el muy imbecil
no sabe nada.


No sabe que yo no estoy ahí
y que lo observo de lejos
con esa mirada que emite luces
y que hace caer a una chica
que buscaba cosas trabadas.